24 de noviembre de 2012

Cueva de los Maquis

 

 
 

El sendero se localiza en el Cerro de Risco Blanco, zona conocida como “La Almoraima”, Parque Natural de los Alcornocales, término municipal de Castellar de la Frontera.

 
 
 
 
 
La ruta comienza en la Venta de La Jarandilla, situada en el valle del río Guadarranque, desde aquí cruzaremos el puente del río Jarandilla que esta a nuestra derecha, ascenderemos por la calzada hasta la primera bifurcación, seguimos por nuestra derecha hasta encontrarnos una cancela, siempre está cerrada pero nos permite el paso por su lateral.
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Continuamos avanzando hasta la siguiente bifurcación, mantenemos la derecha cambiando de asfalto a camino de zahorra, a nuestras espaldas la presencia constante del Castillo de Castellar, su contorno medieval es inconfundible, también tenemos una estupenda panorámica de la bahía.

 
 
 
 
 
A media altura del carril nos desviamos introduciéndonos en el alcornocal, el punto de ascensión es la charca erizada de juncos, caminamos por la Finca de la Almoraima perteneciente a la familia de Ruiz-Mateos, hoy día es propiedad estatal y la gestiona el Organismo Autónomo de Parques Nacionales.

 
 

 
Rodeamos la charca y en dirección norte al encuentro de un claro donde una pequeña edificación encalada nos da la pista para tomar el sendero, zizaguenado un poco llegaremos a los riscos blancos de los Bazanes, donde podemos observar la erosión de la roca arenisca, aflorando esqueletos de otras épocas, aquí hay que buscar el acceso al pequeño alcornocal.
 
 
Una vez allí ya observaremos las oquedades y sin ninguna duda identificaremos la laja donde está la conocida Cueva de los Maquis, para acceder a ella hay que atravesar un espeso brezal, desde aquí las vistas son de 360º, esta cueva conserva algunas pinturas rupestre, que sobreviven a las clemencias del tiempo y del hombre, pertenece al denominado arte rupestre, concepto que engloba las pinturas realizadas en las provincias de Cádiz y Málaga entre el 2.500  y 20.000 a.c.

 
 
 
 
 
 

 
Ahora situémonos en el año 1936, cuando un grupo de guerrilleros de la Resistencia Española, movimiento antifascista, denominados los Maquis se refugiaban en los montes escapando de la Benemérita, durante la Guerra Civil, al estadillo de la Segunda Guerra Civil muchos de los excombatientes republicanos permanecían en Francia, y se incorporaron a la Resistencia Francesa, a partir de 1944 se retiro el ejército alemán,  algunos reorientaron su lucha hacia España, pese al fracaso de la invasión del Valle de Aran  consiguieron progresar hacia el interior y enlazar con las partidas que habían permanecido en el monte hasta 1939.

 
 
 
 
El máximo apogeo fue entre 1945-1947, a partir de aquí se intensifico la represión franquista, que poco a poco fue terminando con las partidas, en 1952 se procede a la evacuación del último contigente de importancia, el final de los Maquis lo marca las muertes de Ramón Vila en 1963 y José Castro en 1965.

 

 
 
Es curioso pensar que un lugar tan apartado haya servido de refugio, pero las inscripciones cinceladas lo demuestran, como “Viva el comunismo 1936”, “Viva la revolución” o “Viva Azaña”.
 
 
 
 
 
 
Una vez hagamos el descaso que nos merecemos continuamos, en esta ocasión nos toca descender, atravesando el alcornocal dirección la presa llegamos de nuevo a la carretera, solo hay que seguirla hasta la Venta la Jarandilla.