Amanecer en Camposoto - Punta del Boquerón

     Este sendero es sin duda uno de más hermosos que se puede recorrer en el Parque Natural de la Bahía de Cádiz, discurre en su mayoría por la línea de transición, entre el Caño de Sancti Petri y las dunas de la Playa del Castillo, terminando en la Monumento Natural Punta del Boquerón, el cual constituye el extremo meridional de una flecha litoral.

     Salimos a las cinco de la mañana dirección San Fernando, teníamos que estar temprano en el comienzo del sendero de la Punta del Boquerón, éramos bastantes, el madrugón no impidió la buena aceptación que ha obtenido esta propuesta, el objetivo era realizar este hermoso sendero de noche y ver el amanecer en la playa en el Caño de Sancti Petri.

     Como hormiguitas en plena noche realizamos el sendero, solo las luces de nuestras linternas alumbraba nuestros pasos, la oscuridad cubría la zona así que el grupo desconocía las maravillas que el Espacio Natural les depararía al regreso, cuando lo realizáramos de día.

     Entre pasarelas y arena alcanzamos el Fuerte Urrutia, esta batería fue construida durante el S. XVIII para defender a San Fernando, su nombre se debe al General José de Urrutia, que fue Ingeniero General del Ejercito Español.

 

     Esta Batería jugo un papel decisivo en la monarquía absolutista a España tras el periodo conocido como “Trienio Liberal”, en 1823 la guarnición de esta batería formada por el Regimiento San Marcial, a la sazón uno de los más potente de la zona de la bahía, se sublevó y entregó la posición apoyando al Duque de Angulema, que al mando de los Cien Mil Hijos de San Luis trataba de volver a sentar en el trono al Rey Fernando VII.

     Llegábamos a la playa aún de noche, esperábamos el momento del crepúsculo, unas nubes negras permanecía sobre la Sierra de Grazalema, escépticos estamos dudando si podríamos disfrutar del amanecer.

     Clareaba y empezábamos a distinguir algunas siluetas conocidas, como el Picacho y el Aljibe, picos inconfundibles del Parque Natural de los Alcornocales, sin embargo la sombra de la Sierra de Grazalema se nos resistía, estaba tapada por las nubes.

........... y que cumplais muchos más.

     Aprovechamos el momento para repartir algunos dulces y para cantarles cumpleaños felices a Mª Jesús, Pepe y Juan Antonio, una sorpresa inesperada.

     A las siete aproximadamente despuntaba la mañana sobre esas nubes antes mencionadas salía el sol, todos andábamos expectantes con nuestras cámaras para inmortalizar el momento, tan hermoso que nos hacía sentir diferentes.

Fabulosa amigo Seve.

     Los primeros rayos iluminaban el embarcadero con tonalidades anaranjados, el sol comenzaba a reflejarse en las aguas de la bahía, “Amanecía” y la claridad nos permitía ver la belleza de la zona.

     Tras esos estupendos momentos regresábamos por el camino ya andado anteriormente, ahora si disfrutábamos de los valores geomorfológicos, botánicos y paisajísticos que nos ofrecía el lugar.

     Lo primero que descubrimos fue la planicie intermareal casi inundada y sobre ella un manto fino de algas verdes y plantas del extracto superior, zona que frecuenta la avifauna del lugar para alimentarse, nosotros no tuvimos la ocasión de ver alguna de estas aves ni por casualidad, ya que algunos participantes no mantenía el silencio en el recorrido, una ocasión que desaprovechamos.

Salado - Limoniastrum Monopetalum.

     Luego va apareciendo las marismas, el terreno aquí es más estable, la vegetación existente aguanta bien los cambios de mareas, la especie dominante de esta zona es el limonium junto con otras de tallos carnosos.

Bahía de Cadiz.

Castillo de Sancti Petri.

     Por nuestra izquierda disfrutábamos del mar Atlántico rompiendo en el cordón blanco de la Playa de Camposoto y del sistema dunar que a veces se adueñaba del sendero y que nos hacía caminar con más lentitud.

Duna movible.

Azucena maritima - Pancratium Maritimum.

Alheli marino - Malcomia Littorea.

     Las azucenas marítimas nos sorprendían con su belleza acompañadas del color violeta de las pequeñas florecillas de los alhelies, una paleta espectacular de colores en una zona salinera, pronto llegábamos al Mirador, desde aquí teníamos una estupenda panorámica de la Bahía de Cádiz.

     Poco después acabábamos el sendero, y tomábamos el autobús para irnos a desayunar, tras el descanso y como aún teníamos tiempo dimos una pequeño paseo por el Parque Barrero, el bandalismo se ha apoderado de él, pintadas e inmobiliario destruido, aunque posee una belleza vegetal extraordinaria muy bien cuidada.

     Aqui en el Teatro de las Cortes, por aquel entonces llamado Teatro Cómico, se dio lugar el acontecimiento más importante de la historia de San Fernando, acaecido a principios del S. XIX, durante la Guerra de Independencia Española, la redacción de la primera constitución liberal española y la tercera del mundo, la Constitución Española de 1812, mientras la Isla de León era sitiada por las tropas napoleónicas y era, junto con Cádiz, el único bastión de la resistencia española frente al invasor, se reunieron en el Teatro de Comedias los diputados que elaboraron el texto constitucional que finalmente se promulgó en Cadiz, y por lo tanto la capitalidad de España se situó en San Fernando, gracias a este hecho, la localidad obtuvo el título de Ciudad y el nombre de San Fernando, en honor al entonces monarca Fernando VII.

     Mientras paseabamos algunos recordaban el trágico asesinato en el 2000 de Clara García, sus asesinas ya gozan de libertad, pasamos junto a su monumento, una placa en su memoria nos encoge el corazón,  nuestro apoyo a sus padres y familiares.

NO A LA LEY DEL MENOR INJUSTA QUE PERMITE

QUE ASESINOS Y VIOLADORES ESTEN EN LA CALLE 

     Tras el pequeño paseo nos dirigimos a la Escuela de Suboficiales de la Armada para visitar el Panteón de los Marinos Ilustres y el Museo Naval, ubicado en la Población Militar de San Carlos, como no se podía entrar hasta las 10:30 h. dimos un pequeño paseo por los alrededores.

Crías de golondrinas.

     No estaba permitido hacer fotos en el recinto militar, por cuestiones de seguridad, es un edificio de estilo neoclásico del S. XVIII, Sergio, nuestro guía nos condujo al Panteón y nos mostró de una forma divertida la iglesia y los mausoleos fúnebres de las distintas personalidades militares que allí reposan, entre anecdotas y batallas visitamos el Panteón, fue muy ameno y divertido, sabiendo en el lugar en que estábamos.

     Nos encontramos con lo que tendría que haber sido la Iglesia de la Purísima Concepción Patrona de España y de las Indias, advocación a la que tenía gran devoción el monarca reinante de la época Carlos III, esta iglesia formaba parte de los edificios a construir en la población de San Carlos y que por falta de presupuesto las obras quedo parada, no es hasta 1959 cuando se dieron por finalizada.

     Después visitamos el Museo Naval, aquí cambiamos de guía, el museo está dedicado a temas relacionados con el mar y en particular con las armadas del mundo y más específicamente con la Armada Española.

     La chica que nos guiaba por las distintas salas más bien era una especie de magnetófono histórico parlante, hablaba y hablaba sin interrupción, un poco pesado se nos hizo el recorrido del museo, tampoco podíamos echar fotos, pero lo curioso es que si te metes en su web te puedes bajar toda las que quieras, yo no colgare ninguna y prefiero reservarme mi opinión.

    Estuvimos pasando de una sala a otra sin interrupción alguna, las diecinueves salas están repartidas entre las plantas baja y primera a la cual accedimos por unas escaleras de diseño espiral con paredes revestidas con azulejos originales de Delfl (Holanda) del S. XVIII.

     Destacar la colección de barcos en madera de guayacán, D. José Belmonte Ruiz, ha querido reflejar a través de los distintos modelos tallados la evolución de los barcos a lo largo de la historia del hombre, desde los inicios hasta nuestros días.

     También destacar la bandera de combate del Acorazado Carlos V, una pieza de valor incalculable, del S. XIX, mide sesenta metros cuadrados, bordada en hilo de seda, oro, plata, piedras semipreciosas y piezas de terciopelo recamado, el león tiene los dientes, bigotes y garras de un león auténtico, se cree que fue bordada por S. M. la Reina María Cristina y sus damas, aunque no hay constancia oficial.

     Aunque hay piezas y colecciones importantes creemos que para enseñar el museo no hace falta bombardear al visitante con tanta información histórica, el grupo se sentía cansado así que poco después decidimos dar por terminada la visita.

     Luego pasamos por la rotonda de los Hornos Púnicos, los hornos fenicios y púnicos que se exhiben en la rotonda constituyen un conjunto excepcional en Occidente, tanto por el elevado número de estructuras productivas excavadas como por su estado de conservación, en ella se exhiben los restos de dos importantes talleres alfareros asociados a la Ciudad de Gadir; el alfar tardo-púnico de Torre Alta y los hornos fenicios procedentes del Sector III de Camposoto, este asentamiento está desplazado, no está en su colocación verdadera, el lugar original sería debajo de un edificio a 30 m. de la rotonda.

     Terminamos nuestro recorrido cultural en la Peña del Camarón.

     La Peña del Camarón de la Isla se constituyó el 18 de diciembre de 1989, el 1 de diciembre de 1991 fue colocada la primera piedra por D. José Monge Cruz, poco antes de morir, y en 1995 se inauguró, hoy día es un Centro del Flamenco, donde se puede ver un Museo dedicado a la vida y trayectoria del artista.

¡Hasta la proxima!